domingo, enero 14, 2007

Peaches Staten en Ruta 61

Tania Molina recuerda lo que sucedió el viernes 24 de noviembre, después de la apertura del X Festival de Blues:

La noche apenas había comenzado. Luego del concierto, varios músicos fueron invitados por amigos a visitar nuestro propio oasis blusero: Ruta 61. Vieja Estación, banda que tocó esa noche, invitó al armonicista Billy Branch a echarse un palomazo. El espíritu del blues escuchó el llamado e hizo de esa madrugada una de las más memorables para los asiduos a ese bar. Aquello terminó en una tremenda fiesta, en la que tocaron juntos músicos de distintas bandas invitadas al festival. México juntó en un mismo escenario a artistas que en Chicago andan cada uno por su lado (algunos intercambiaron tarjetas de presentación, prometiendo establecer contacto a su regreso). Aquello fue una gran celebración de la vida, del gozo y del dolor. La cantante Peaches Staten dijo: "Es como estar en un club de Chicago", y Billy Branch exclamó en español desde el escenario: "¡Aquí estoy en mi casa!". "When we get together/ everything is gonna to be all right", cantó el tecladista John Kattke. Y sí, ésa era la sensación, "cuando nos juntamos, todo está bien".

Hasta ahí Tania (y de ella recomiendo leer su más reciente reportaje, que trata sobre Bruce Iglauer, creador de Alligator Records). Sólo añado algunos de los nombres de los músicos de Chicago que entonces nos acompañaron: Billy Branch, Peaches Staten, Zora Young, Nick Charles, Dave Specter, Mose Routes, Harlan Terson, Shirley Johnson, Jeffery James, Cig Anderson y Marty Binder. Y para coronar el encuentro, también estuvieron con nosotros Marie Dixon y K. Dixon, viuda y nieta del divino Willie Dixon.

Ahora, va su servilleta.
Quienes las noches del 24 y 25 de noviembre pasados tuvimos la fortuna de estar en Ruta 61, fuimos entonces testigos de la presencia en el escenario de un cúmulo milagroso de músicos chicaguenses (chicagoans, dicen los guasingetones). Todos juntos, hicieron de la velada una de las más hermosas en la historia general del blues y en la historia nocturna de nuestra ciudad.

Entre esos músicos estuvo Peaches Staten, a quien vemos en la foto anterior en amena conversación con Ezequiel Espósito, el Polaco, voz principal de Vieja Estación.

Lo que sigue es lo que de esta bella mujer escribí en el programa de mano del X Festival de Blues, organizado por nuestro querido Raúl de la Rosa. Hay, por supuesto, mucho de plagio internético en esto, porque estoy guardando mis palabras sobre Peaches para fines de enero, cuando haga la reseña de su visita a nuestra ciudad y de sus tres presentaciones en Ruta 61.

La Staten es hija legítima del Delta del Mississippi. Desde edad muy temprana, Peaches estuvo rodeada del blues de Chicago, porque su padrastro trabajaba como disc jockey en varios clubes de la ciudad, y su madre pertenecía a un club social a cuyas fiestas nunca faltaba algún buen músico de blues. Además, Peaches trabajó como mesera en el Rosa´s Lounge (en el programa de mano puse, tontamente, que Peaches había sido mesera del Mama Rosa´s, olvidando que en México contamos con un restaurante de comida mexicano-italiana llamado así, precisamente, pero que nada tiene que ver con el lugar abierto por Tony Manguillo en 1984).

La versatilidad y la fuerza de su voz, en la que algunos encuentran influencias de Bessie Smith, Billie Holiday y Koko Taylor, la han llevado a compartir escenario con Buddy Guy, Junior Wells, la misma Koko Taylor, Dr. John, Billy Branch y muchos otros.


Conmovida, agradecida y encantada por la respuesta del público, la extraordinaria e inolvidable Peaches Staten vuelve a la Ciudad de México para presentarse en Ruta 61 los días 18, 19 y 20 de enero.

¡Por amor a ti mismo, lector mío,
aparta tu mesa ya!


Mira, hagamos un trato. Llama al 5256-0667 ó al 5211-7602, y haz tu reservación para cualquiera de los tres días. Hecha la reservación, envíame un mensaje a bastaturostro@gmail.com e infórmame sobre el día en que piensas aparecerte. Yo te llevo entonces tu credencial del Club de la Estufa Divina, identificación que te hará merecer una cerveza gratis y (si la diva se deja) una fotografía con la misma Peaches Staten.

El Club de la Estufa Divina
Génesis 18, 23-33; 19, 24-25.

Quiero expresar mi más profundo agradecimiento a los 28 lectores que, cariñosos, se tomaron la molestia de escribirme en recientes días. Apenas me encuentre con cada uno de ellos, les haré entrega de su respectiva credencial del Club de la Estufa Divina, junto con una deliciosa cerveza en Ruta 61.

Va aquí la lista de los primeros 27 lectores, con su número de credencial y, en algunos casos, su fotografía y una liga hacia su propio espacio virtual.

Jaime Holcombe
Voz y guitarra de Las Señoritas de Aviñón
Credencial 001

José Manuel Gayosso
Credencial 002

Eduardo Serrano
Fundador de Ruta 61
Credencial 003

Héctor García Chavarría
Credencial 004

Ícaro
Credencial 005

Leyenda viva del rock and roll
y astronauta retirado
Credencial 006


Javier García
Baterista de Las Señoritas de Aviñón
Credencial 007


Maricarmen González Tavira
Terapeuta Holística
Credencial 008


Antonio Miranda Duarte
Médico
Credencial 009

Carlos Carabba
Guitarra y voz de Bufones Dementes
Credencial 010

Golf R
Credencial 011

Marie Alvarodíaz
Correctora de estilo
Credencial 012

Corina Gutiérrez Corona
Credencial 013

Luis David Contreras
Poeta
Credencial 014

Claudia Treviño y Julián Juárez
Vitralistas
Credenciales 015 y 016


Francisco Cervantes y María Fernanda Gutiérrez
Músicos
Credenciales 017 y 018

Judith
Colibrí
Credencial 019

Nicolás Martínez Marentes
Guitarrista de D-Lyria
Credencial 020

Ezequiel Espósito
Voz y guitarra de Vieja Estación
Credencial 021


Ignacio Espósito
Baterista de Vieja Estación
Credencial 022
Octavio Herrero
Guitarrista de Las Señoritas de Aviñón
Credencial 023

Carolina Román Mallada
Diseñadora Gráfica
Credencial 024

Daniel Martínez Saucedo
Compositor
Credencial 025

Gilles Aniorte
Productor de Radio
Credencial 026

Marie Croix
Desde Chiapas
Credencial 027


José Luis Sánchez
Tecladista de Vieja Estación
Credencial 028
Yo sé que otros lectores de esta bitácora no tuvieron tiempo de enviar su mensaje para confesar su adicción.

Santiago Espósito
(extraordinario guitarrista), por ejemplo, me decía (y le creo) que él entra con cierta frecuencia. Me consta que lo hace Octavio Herrero (uno de los mejores guitarristas de la ciudad y acaso el mejor y más enterado escucha de blues en México), y que el Polaco (Ezequiel Espósito, la hermosa voz de Vieja Estación) me lee los viernes, siempre y cuando no hable de política ni de mis problemas amorosos (de hecho y como esta bitácora es relativamente atemporal, el comentario de don Ezequiel ya aparece en la entrega anterior).

Supongo que Josefáin Sánchez (el Nicky Hopkins de Buenos Aires) entra de vez en cuando, lo mismo que Mauro Bonamico (bajista hijo mío)… y Carolina Román, catalana preciosa, me sigue los pasos desde Barcelona. Pero ni Santiago, ni Octavio, ni el Polaco, ni Josefáin, ni Mauro, ni Caro recibirán su credencial hasta que no se tomen la molestia de escribirme y declararme su veneración. Ahora, el mensaje deberá ser: Agus mío, Señor Dios Rey de los Ejércitos, yo no soy digno de que vengas a mí… pero una palabra tuya bastará para sanar mi alma.

Entonces, no se diga más: Nos vemos el jueves 18, el viernes 19 y el sábado 20 de enero en Ruta 61, para aliviarnos con el blues de Peaches Staten.

Sólo una advertencia: el cupo es limitado, por lo que a cierta hora (lleno el Hoochie Coochie Bar) ya no hay posibilidades de meterse. Por eso, insisto en que llames hoy mismo a Lalo Serrano, dueño de Ruta 61 (5256-0667 ó al 5211-7602), para que lo comprometas a reservarte una mesa.

El reporte más reciente de Lalo Serrano
(martes 16, 21:00 horas), dice:
Las reservaciones para cada uno de los tres días
ya rebasan el 85%.


Conste que lo estoy diciendo con tiempo. Luego, que nadie se queje.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Agustin, dios de los ejercitos prusianos de mediados del siglo 19, te exijo y de rodillas ante ti te suplico una acreditacion a tu selecto club de admiradores.
No me interesa la cerveza, solo quiero ser miembro.

Anónimo dijo...

A mi tampoco me interesa la cerveza, solo quiero tu miembro.
atte: una admiradora.